Con un complejo procedimiento se encontró una pareja de carabineros hace pocos días, cuando tras recibir una desesperada denuncia por parte de un guardia de seguridad, tuvieron que hacer frente a un delincuente que como pocos, no dudó un segundo a la hora de poner en riesgo su propia vida para tratar de escapar de la policía.
Según se pudo conocer, todo ocurrió en en horas de la tarde del martes al interior de un edificio en construcción en Calle Alberdi con la Avenida Valparaíso a cargo de la empresa Constructora Lota. En ese lugar se encontraba trabajando como guardia de seguridad un adulto mayor de 69 años, quien de pronto se vio sorprendido cuando sintió una soga alrededor de su cuello.
VIOLENTO ASALTO
El responsable de esto era un delincuente que sin ser visto había ingresado al edificio. “Entrega todo si no quieres que te mate”, le dijo el desconocido, quien luego de amenazar al guardia, le quitó los dieciocho mil pesos en efectivo que llevaba consigo y dos teléfonos celulares, para luego amarrarlo de pies y manos antes de dejarlo tendido en el suelo.
No pasó mucho rato hasta que otro de los guardias vio con horror como su colega estaba tendido en el suelo, por lo que fue en su ayuda mientras marcaba el número de Carabineros para denunciar la situación. Afortunadamente, justo en ese momento, una pareja de funcionarios policiales se encontraba realizando un patrullaje en Calle Alberdi, por lo que no tardaron más de tres minutos en llegar al sitio del asalto.
SALTÓ CASI CUATRO METROS
Al llegar, los carabineros se encontraron con los dos guardias, quienes les contaron que el delincuente aún se encontraba en el edificio y les indicaron el sector hacia el que lo habían visto esconderse. En ese momento, los dos policías iniciaron la búsqueda del antisocial, por lo que uno de ellos ubicó al segundo piso donde logró divisar al desconocido, quien llegó hasta el borde de un andamio en el segundo piso de la obra y no dudó un instante en saltar cerca de cuatro metros, sin embargo el otro funcionario, que estaba muy atento, logró retenerlo tras la aparatosa caída.
Luego de algunos minutos de forcejeo, entre los dos carabineros lograron finalmente detener al antisocial, quien junto con tratar de agredir a los policías, los insultó y hasta los amenazó de muerte señalando que llevaba pocos días libre tras una condena en Colina Uno. “No estoy ni ahí con matar un paco”, les gritaba, alegando que en pocos días quedaría libre para esperarlos afuera de comisaría, gritando que también mataría al “viejo” (al guardia) y que volvería a robar en el mismo edificio.
INSULTOS, ESCUPOS Y AMENAZAS
El mal comportamiento del detenido no quedó ahí, ya que en todo momento trataba de golpear a los carabineros y una vez fue trasladado a constatar lesiones al Servicio de Alta Resolutividad (SAR) de Quillota, escupió a carabineros y personal médico, quienes le diagnosticaron lesiones leves provocados por su temerario salto desde el segundo piso del edificio en construcción.
Tras la detección fueron recuperados los dos teléfonos celulares robados al guardia agredido, además de una serie de elementos de construcción como un serrucho eléctrico, galletas y diversas herramientas que eran propiedad de la empresa constructora. Del mismo modo, horas más tarde uno de los trabajadores de la obra llegó hasta la comisaría denunciando el robo de una mochila con sus elementos personales, los que también estaban en posesión del delincuente quien en todo momento indicó que era de su propiedad.
Finalmente el violento delincuente fue puesto a disposición del Tribunal de Garantía de Quillota para pasar a audiencia de Control de Detención en la que se determinó la medida cautelar de prisión preventiva al considerarlo un peligro para la sociedad.
