Muchas de nuestras celebraciones van acompañadas de picoteos y comidas especialmente preparadas y sin duda, son muy atractivas para nuestras mascotas. Pero tenemos que tener mucha atención, ya que ¡no todo lo que nosotros comemos es apto para perros o gatos!
En Navidad, muchos niños reciben chocolates de regalo, y dentro de los componentes del chocolate se encuentra la teobromina, molécula tóxica y dañina para perros y gatos. Por lo que debemos estar atentos, y dejar los chocolates fuera de su alcance, especialmente en cachorros y animales pequeños, porque en caso de consumo hay una mayor proporción de teobromina por kilos del animal, generando mayores problemas gastrointestinales, incluso poniendo en riesgo su vida.
También debemos estar atentos a comidas que contengan cebolla y ajo, ya que pueden ser tóxicos para nuestras mascotas. Así como también, debemos evitar que perros consuman uvas o pasas, ya que éstas podrían ocasionarles insuficiencia renal, por lo que deben estar fuera de su alcance.
Y como tutores debemos evitar que nuestras mascotas consuman huesos, ya que los huesos cocidos pueden astillarse y provocar obstrucción o incluso la perforación del tracto gastrointestinal. No olvidemos, además, que los restos de comida pueden ser muy atractivos para nuestras mascotas, por lo que la recomendación es utilizar doble bolsa de basura y dejar los basureros tapados y fuera de su alcance. Frente a síntomas gastrointestinales, el consejo siempre es visitar a su médico veterinario lo antes posible.
Y como no todo puede ser prohibición, de forma excepcional puedes darle un snack saludable o bien, prepárales una pequeña porción de pollo cocido sin huesos ni aliños.
Siguiendo estos consejos, ¡esperamos que puedan tener una linda navidad en familia con sus mascotas!
Javiera Rodríguez González
Académica carrera de Medicina Veterinaria
Escuela de Ciencias Agrícolas y Veterinarias
Universidad Viña del Mar