En el arranque de la Copa Viña del Mar, y ante unos quince mil espectadores presentes en el estadio Sausalito (13.158 controlados), la mayoría hinchas albos, Everton cayó derrotado por la cuenta mínima ante Colo Colo, en un duelo donde el gran atractivo fue el debut de Arturo Vidal en el equipo popular.
Con mayor rodaje futbolístico, pues había jugado tres partidos amistosos durante la pretemporada que realizó en Uruguay, el elenco dirigido por el técnico argentino Jorge Almirón dominó las acciones desde el primer minuto, y complicó a los ruleteros presionándolos en su sector defensivo.
En los once minutos de juego llegó el que a la postre sería el único gol del encuentro, gracias a un preciso tiro libre ejecutado por Carlos Palacios, quien con un calculado derechazo dejó sin reacción al portero Ignacio González, uno de los nuevos fichajes del conjunto que dirige Francisco Meneghini.
Everton sintió el golpe, y pese a que por algunos pasajes del partido tuvo el control del balón, no se generó tantas ocasiones en la portería de Brayan Cortés. Al contrario, el mismo Palacios y otros jugadores como Leonardo Gil tuvieron varias chances para alargar las cifras para Colo Colo, que se quedó con una merecida aunque algo estrecha victoria.
El punto negro de la jornada se registró durante el primer tiempo, cuando se jugaban 30 minutos del partido, y un grupo de barristas colocolinos avanó por la tribuna Andes del estadio con el afán de ir a pelear con los hinchas evertonianos. Intentaron derribar una reja y tuvieron detenido el partido por cerca de siete minutos.
Eso, aparte de encender fuegos artificiales desde que salieron los equipos a la cancha, y de incendiar algunas butacas en la galería laguna una vez terminado el partido.
(Fuente: Biobío)