Esval diseñó un plan especial para reforzar la operación y garantizar el servicio a los clientes y los turistas que visitarán la zona para celebrar el Año Nuevo, ya que se estima que el consumo del agua potable podría aumentar hasta un 40% en las zonas costeras durante el 31 de diciembre.
Sobre lo anterior, Alejandro Salas, gerente regional de Esval, señaló “como cada temporada, nuestros equipos están preparados para hacer frente a la mayor demanda esperada, que se estima en 74 millones de litros adicionales sólo en la jornada del 31 de diciembre, lo que equivale al consumo promedio de más de 2.700 hogares en un mes”.
El plan contempla un monitoreo en línea y en tiempo real de los niveles de regulación de los estanques, los caudales y las presiones de agua mediante el Centro de Inteligencia Operacional. Esta medida permite ajustar la operación de manera dinámica a la evolución de los consumos a lo largo del día.
Además, se realizará un chequeo constante de las instalaciones y los sistemas de producción y tratamiento de agua, así como también se hará un mantenimiento preventivo de los equipos de respaldo eléctrico.
Finalmente, el gerente regional de Esval destacó que “si bien la disponibilidad de agua es mejor que en temporadas anteriores, gracias a las inversiones realizadas durante el año, el gran trabajo de nuestros equipos en la recarga del embalse Los Aromos y las lluvias de invierno, la sequía está lejos de superarse. Nuestro llamado es siempre a un consumo responsable”.
